Lo que pudimos presenciar anoche en el Levi´s Stadium resulta complicado de entender. Los 49ers hicieron el más difícil todavía para perder un partido que tenían más que ganado, en su propio estadio y ante un rival como los Jets que tienen tantas ganas o más que San Francisco de que termine esta horrible temporada.
Jimmie Ward interceptaba a Bryce Petty en la segunda jugada ofensiva del encuentro. En el primer snap de los niners Colin Kaepernick pasaba a Carlos Hyde, que anotaba el primer touchdown. 7-0 para los locales. Tras un tres y fuera de los Jets, San Francisco anotaba por segunda vez en un rápido drive de cuatro jugadas. Hyde era el auténtico protagonista de la acción, su carrera de 47 yardas preparaba el camino para su compañero Shaun Draughn. Tan solo 3:15 de partido y los niners 14-0 arriba, inmejorable comienzo. El runningback de tercer año finalizó con 193 yardas vía terrestre en apenas 17 intentos, su mejor actuación en la NFL. Por ello le adjudicamos nuestro particular GAME BALL que prácticamente habíamos guardado en el baúl de los recuerdos por mor de la racha perdedora del equipo.
Mientras la defensa controlaba sin problemas al ataque de Nueva York, Hyde seguía haciendo de las suyas y ganando yardas por doquier. El problema es que empezamos a atascarnos en las últimas yardas y hubo que chutar tres field goals consecutivos. Phil Dawson, de las pocas cosas seguras que teníamos en plantilla hasta ayer, falló dos de los tres. Eso dejó a los Jets con opciones de remontar en el segundo tiempo.
Pese a que la defensa ponía presión sobre Betty (dos de los seis sacks se los apuntó el novato DeForest Buckner, que ofreció una prometedora imagen), su compañero Bilal Powell empezaba a aprovechar la debilidad de nuestra defensa terrestre. Powell se convirtió en el décimo hombre en ganar más de 100 yardas por el suelo contra los niners. Poco a poco los Jets fueron acercándose en el marcador, llegando a empatar a 2:35 de la conclusión. ¿Qué hizo la ofensiva de Chip Kelly entre tanto? Cinco drives tras el descanso, cinco punts, 32 yardas totales, cero puntos. Apagón absoluto.
En la prórroga San Francisco comenzó atacando. En 4ª y 2 desde la 37 de los Jets Kelly apostó por buscar el primer down. Hyde era parado en la misma línea de scrimmage. Unas pocas jugadas después, Powell cerraba el partido y mandaba a sus casas a los pocos espectadores que quedaban en las gradas con un touchdown de 19 yardas clásico de lo que ya hemos visto tantas veces este año: fallos en las tres líneas de la defensa y un corredor que produce mucho más de lo que debiera haber hecho.
Doce derrotas consecutivas, doce. Ver para creer. Todos pensamos que la temporada pasada fue una pesadilla y que no volveríamos a ver a nuestro equipo tan mal en mucho tiempo. Qué equivocados estábamos. La versión 2016 de San Francisco 49ers está haciendo buena a la versión 2015.